Cuando se cumplen 37 años del golpe militar, la vida de miles mujeres en Argentina está enteramente precarizada: dejamos nuestra salud en largas jornadas laborales, con altos ritmos de producción en fábricas donde sigue habiendo dictadura... patronal. No sólo soportamos turnos rotativos, bajos salarios y condiciones insalubres, sino también el acoso de jefes y capataces, el desprecio de la burocracia sindical y la extorsión de los patrones, ante quienes debemos ocultar si somos madres o si quedamos embarazadas. También seguimos cargando con la responsabilidad del trabajo doméstico y, en los últimos diez años, vimos cómo se duplicó el número de hogares donde el sostén familiar es una de nosotras. Las más jóvenes somos las que dejamos nuestras vidas en abortos clandestinos, obligadas a recurrir a los métodos más cruentos, cuando debiera ser un derecho elemental en cualquier hospital público. Pero también, vemos crecer los índices de embarazo adolescente y en una forma cada vez más alarmante, somos secuestradas y “desaparecidas” por el impune accionar de las redes de trata.
El Papa es argentino y el aborto clandestino
¡El gobierno es responsable de esta situación! Y no sólo el gobierno. Ahora, cuando se cumple un nuevo aniversario de aquel golpe de Estado de 1976, el Vaticano premia a la Iglesia argentina –cómplice de la dictadura- nombrando Papa al arzobispo Jorge Bergoglio, con comprobados vínculos con los militares (ver contratapa). Toda la oposición patronal celebró su nombramiento, ya que fue un vocero de sus reclamos y es muy cercano a Gabriela Michetti del PRO o Elisa Carrió. Hermes Binner, “Pino” Solanas, Scioli, Macri, De la Sota, varios referentes kirchneristas y hasta burócratas de la CGT oficialista y de la CGT opositora como Moyano saludaron su nombramiento. ¡Esa Iglesia oscurantista, cómplice del genocidio, encubridora de curas abusadores y enemiga de nuestros derechos, también es responsable!
Pero aunque Bergoglio, el nuevo Papa, tuvo enfrentamientos con el kirchnerismo, especialmente por encabezar una reaccionaria campaña contra la ley de matrimonio igualitario, tiene un gran punto de acuerdo con Cristina: la férrea oposición de ambos a la legalización del derecho al aborto (ver contratapa). ¡Los militares hicieron una cruzada contra nuestro derecho a decidir que se continúa, 37 años después, con este régimen en el que seguimos muriendo por las consecuencias del aborto clandestino! El gobierno, la Iglesia y la oposición derechista son los responsables.
¡Seamos miles de mujeres organizadas!
En estos días, vemos cómo las docentes pelean por aumento de salario. Más de medio millón de trabajadoras y trabajadores estatales bonaerenses hicieron paro. En Neuquén, la lucha docente también es por el salario y contra el ataque del gobernador Sapag al derecho de huelga. Las maestras son algunas de las miles y miles de mujeres que hoy empiezan a mostrar su descontento con el gobierno (ver págs. centrales).
Porque también está la bronca de las jóvenes, que saben que el verso del “progresismo” se acaba con las órdenes de Cristina de “cerrar filas” con el Vaticano, contra nuestro derecho a decidir. Y que es pura cháchara la ley contra la trata, cuando las redes que secuestraron a Marita Verón y a más de 600 jóvenes en todo el país, pueden operar por el amparo o la participación de la justicia, los funcionarios y las fuerzas represivas del Estado, incluyendo la Gendarmería que, a su vez, se infiltra y espía a las luchadoras y luchadores (ver contratapa).
Hay miles de mujeres que, en todo el país, vienen masticando la bronca no sólo de un salario que no alcanza en la carrera contra la inflación, sino de una vida que está enteramente precarizada.
Con centenares de esas mujeres trabajadoras, amas de casa, inmigrantes, estudiantes de todo el país, las compañeras de Pan y Rosas y el PTS estamos poniendo en pie un movimiento de lucha por todos nuestros derechos. Por eso, el pasado 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, nos manifestamos junto a otras organizaciones en todo el país y también en México, Brasil, Chile y el Estado Español (ver págs. centrales). El próximo 24 de marzo, nuevamente saldremos a manifestarnos en Plaza de Mayo y en todas las plazas del país, contra el espionaje y las persecuciones, de los que el gobierno K es responsable.
Organizá, vos también, este movimiento de mujeres con nosotras, para enfrentar estas injurias y oprobios, para que no haya ni una mujer muerta más por abortos clandestinos, para que no sigamos siendo secuestradas por las redes de trata, ni siendo las más precarizadas entre los trabajadores y víctimas de múltiples formas de violencia. Queremos acabar con un régimen social donde la casta de políticos enriquecidos gobierna para los mismos empresarios que organizaron el golpe, la reaccionaria Iglesia sigue beneficiándose de los aportes del Estado y donde esta Santa Alianza entre patrones, Iglesia y gobierno se opone férreamente a nuestros derechos. Que ellos no decidan por nosotras. ¡Organicemos un gran movimiento de mujeres trabajadoras, amas de casa, mujeres inmigrantes y desocupadas, estudiantes secundarias y jóvenes universitarias de todo el país, por todos nuestros derechos! |